Ayer se desarrolló una asamblea de las y los trabajadores del Hospital San Roque Viejo convocada por ATE, para abordar diversos temas que preocupan al conjunto del personal del sector Salud.
En la oportunidad, el conjunto de las y los compañeros rechazó a la pauta Salarial Trimestral otorgada por el Gobierno de Córdoba por insuficiente y reclamó una urgente Recomposición Salarial acorde a La Canasta Básica Familiar que hoy supera el millón de pesos, para salir de la condición de trabajadores cada vez más empobrecidos. Hicieron extensivo el reclamo para los y las jubiladas, cuyos ingresos se encuentran perdiendo poder de compra al ritmo de las y los activos.
En tal sentido, la asamblea planteó la necesidad de mantener la unificación de la lucha el conjunto de los Gremios Estatales Representativos “con el objeto de alcanzar un Salario Digno y Mejoras en nuestras condiciones laborales para el conjunto de los trabajadores públicos”, explicó el delegado de ATE, Osvaldo Reynaldo.
Otro punto de atención fue la eliminación del fondo FOSAET, que aumentó los aportes a la APROSS. “No a la Aumento de los aportes Jubilatorios y del APROSS tanto a activos, como a los afiliades voluntarios”, concluyó la asamblea.
No al vaciamiento
Las y los trabajadores rechazaron también los traslados compulsivos en el Hospital Neuropsiquiatrico y en los CAPs. “Estas políticas arbitrarias, autoritarias, de ajuste en el sistema sanitario acarrean al conjunto de les compañeres trabajadores afectados un trastorno que conllevan un desorden en sus formas de organización diaria de vida. Por ende estas disposiciones arbitrarias inciden directamente en sus vínculos sociales, familiares y laborales”, remarcó el delegado.
En lucha por mejoras en las condiciones laborales, reclamando el fin de la precarización laboral en el Estado provincial. Basta de contratos precarizados.
Por la Ley 10889 sin privatizaciones
Por último, la asamblea reclamó la implementación de la Ley 10889, solicitando al mismo tiempo la eliminación del artículo 107 bis que deja abierta las puertas a la flexibilización laboral y privatización en la Salud Pública.