Mientras más de 300 trabajadores y trabajadoras despedidos por el macrismo de la Fábrica Argentina de Aviones (FADEA) aguardan que el gobierno nacional cumpla con el compromiso de reincorporarlos y devolverles los puestos de trabajo, la directora de la firma estatal Mirta iriondo, deja entrever que la definición que en ese momento tomó el Directorio macrista era utilizar una herramienta que las empresas suelen tener para justificar despidos: los retiros voluntarios. Desconociendo Iriondo que la mayoría de ellos fueron bajo presión y amenaza de la patronal.
Así lo dejó trascender en una entrevista reciente de TV donde justificó los despidos, sosteniendo que se trató de “la voluntad de la gestión anterior de disminuir la cantidad de personal”. Macri también tuvo “la voluntad” de tomar deuda externa y entregar atado de pies y manos al arbitrio del FMI el futuro de país, pero eso no justifica que hay que mantener una continuidad de dichas políticas.
Iriondo justificó también los retiros voluntarios que fueron la herramienta del macrismo para generar el vaciamiento de obreros y obreras especializadas y cuadros técnicos indispensables para el desarrollo de la industria aeronáutica de la empresa más grande de Latinoamérica en la materia.
En la entrevista la directora, solamente describe como contrató algunos de aquellos retiros, olvidando comentar si se trata de los gerentes macrista que puso bajo su ala después que termina en un fiasco la ‘revolución de los aviones’ que impulsaba con aviones alquilados y empresas fantasma el Ministerio de Transporte de la gestión Cambiemos.
Decepción, genera que quien consideramos parte del campo popular, que quien durante la campaña 2019 visitó nuestro sindicato hablando cara a cara con las y los despedidos con la falsa promesa de las reincorporaciones, hoy haga oídos sordos al reclamo de quienes exigen volver a trabajar.