Con una inflación que cerró el 2021 en el 51 por ciento y una paritaria nacional que, entre las sumas de la Paritaria 2020 y las sumas de 2021 alcanzaron el 53 por ciento, podría pensarse que la situación salarial de las y los nacionales está controlada. Sin embargo, sabemos que no es así: cuando echamos al macrismo y trabajamos para que asuma el actual Gobierno, lo hicimos con varias premisas, entre ellas de que recuperaríamos el poder adquisitivo de nuestros salarios (ni que hablar del fin de la precarización, las reincorporaciones, la reactivación del aparato productivo estatal nacional, entre otras). A poco más de dos años, en la segunda mitad de su mandato, la administración de Alberto Fernández sigue dejando gusto a poco en sus respuestas a las y los trabajadores. Según un estudio de ATE-INDEC, “la pérdida del poder de compra de nuestros salarios desde noviembre del 2015 es en promedio de un 34,7%. (…) Si le sumamos el bono de fin de año que recibieron solo los trabajadores de la APN del SINEP esa perdida se reduce a 32,26%”. Si la premisa de “ganarle a la inflación para recuperar el poder adquisitivo perdido” es el camino, lamentamos decirles que “ganándole” de a dos puntos a la inflación (podríamos hablar tranquilamente de “empate técnico”), nos llevaría entre 16 y 17 años recomponer lo que perdimos de 2015 a la fecha. Ni que hablar si pasamos la pérdida a los números reales de la economía doméstica de cada trabajador y trabajadora: “un Hogar constituido por una pareja de 35 años con dos hijxs en edad escolar necesitó, en diciembre de 2021, de $123.598.- para satisfacer sus necesidades mínimas”, consignaron nuestros compañeros y compañeras de ATE-INDEC, aclarando siempre que ese número se trata de una “mínimo”, no del “óptimo” o “deseable” ¡Qué lejos estamos de, al menos, empatar esos ingresos! Para corroborarlo, solo basta ver las tablas que compartimos abajo, con las escalas salariales de SINEP y de algunos sectoriales como SENASA y Civiles de FFAA y de Seguridad y IOSFA. Evidentemente, necesitamos medidas más profundas y que apunten a quiénes serán los actores económicos que controlen los bienes y servicios fundamentales para la vida de nuestro pueblo (alimento, vivienda, salud, comunicaciones, transporte, obra pública en general). Impulsar estos cambios, a la vez que exigir recomponer nuestro salario mínimamente a los niveles de 2015 en lo que resta del mandato del actual gobierno para que ningún trabajador/a estatal cobre por debajo de la canasta de consumos mínimos, son las dos caras de la misma moneda.
Sin embargo, del otro lado de la balanza, aparecen los sectores con los cuales el Gobierno de Alberto Fernández sí parece consolidar políticas para sostener y ampliar sus ingresos: los sectores financieros (poseedoras de LELIQ en pesos por el equivalente a más de 47 mil millones de dólares, que vieron mejorada sus tasas estas últimas semanas) y los concentrados ligados al extractivismo y a la exportación de productos primarios, energía y alimentos, que indexan a precios internacionales las producciones que consumen nuestras trabajadoras y trabajadores localmente. Son estos sectores los cultores del sostenimiento de las relaciones con el FMI ya que saben que es este organismo quien, en última instancia, siempre acude para garantizar la fuga de capitales y las “reformas estructurales” de las cuales las corporaciones multinacionales siempre se han hecho partícipes y beneficiarias. Es por eso que, mientras que las reincorporaciones de las y los despedidos por el macrismo en el Estado Nacional, y la tan anhelada recomposición salarial y estabilidad laboral, se dan a cuentagotas, estos sectores siguen ganando a altísimos niveles en este país donde más del 50 por ciento de quienes trabajamos lo hacemos bajo la línea de la pobreza y donde quienes trabajamos en el Estado Nacional no alcanzamos a cubrir la Canasta de Consumos Mínimos elaborada por ATE INDEC. Es por eso que cuestionamos que en 2021 se hayan pagado 5.200 millones de dólares al FMI y que en los próximos días se paguen otros màs de 1.000 millones de dólares (entre capital e intereses). Sabemos que lo que falta en un lado es porque se va a otro: ¿Seguiremos permitiendo estos desembolsos ante la crítica situación que atravesamos quienes trabajamos y percibimos ingresos fijos? Los desembolsos de los préstamos con el FMI se realizaron mientras se producía una fenomenal fuga de capitales que alcanzó más de 86.000 millones de dólares durante el gobierno anterior: continuar con los pagos es legitimar este saqueo del cual el Fondo -por sus propias comunicaciones- estaba totalmente al tanto y que viola no solo normativa del derecho internacional sino los propios estatutos del organismo. Por todo esto es que EXIGIMOS LA INMEDIATA SUSPENSIÓN DEL PAGO DE LA DEUDA: hay salidas soberanas, solo resta convocar al Pueblo a transitarlas, o será el Pueblo quien encontrará sus dirigentes para esos caminos.
Por eso, a horas de comenzar nuevamente los diálogos con el Gobierno Nacional decimos que las y los trabajadores de la APN no esperaremos 15 años para recomponer el poder adquisitivo perdido mientras que la gestión de Alberto Fernández paga puntualmente los vencimientos que el FMI garantizó para financiar la fuga de capitales y mientras se continúa extranjerizando la matriz productiva y fomentando el extractivismo por parte de transnacionales bajo la excusa de conseguir dólares de la “exportación”. La urgencia de dólares para financiar al FMI, a la fuga de capitales y a cancelar deuda privada (como indica Claudio Lozano) no es nuestra agenda: dos años quedan para realizar un shock de recomposición de nuestro salario, dar respuesta a las reincorporaciones y a la puesta en marcha de un Estado que controle los resortes fundamentales de la vida de nuestro pueblo. Dos años donde el pueblo será protagonista: por eso, desde ATE Córdoba, nos declaramos en Estado de Alerta ante esta negociación paritaria. ¡No queremos seguir negociando para salir de la pobreza, sino para tener una vida digna!¡Basta de entrega y de hipotecar nuestro presente y futuro!
CONVOCAMOS A NUESTRAS DELEGADAS Y DELEGADOS a PLENARIO PRESENCIAL el próximo MIÉRCOLES 02/02 a las 10:00 hs en el CDP de ATE Córdoba (Entre Ríos 450).