El Consejo Directivo Provincial de ATE Córdoba expresa su más enérgico repudio a los despidos.
Se trata de 30 compañeros despedidos en cada una de las dos plantas fabriles que el organismo tiene en Córdoba, Villa María y Río Tercero. La noticia se conoció hoy por lo que las conducciones gremiales de ambas seccionales de ATE se convocaron en asamblea para analizar los pasos a seguir.
Por lo pronto, la secretaria General de ATE, María Liliana Salerno, adelantó que nuestra organización se encuentra en estado de alerta y movilización, hasta tanto se resuelvan nuevas medidas.
“Vamos a pedir la reincorporación de todos los compañeros afectados y recurriremos a todas las medidas gremiales necesarias para evitar nuevos despidos”, dijo Salerno, que es trabajadora del organismo en Río Tercero.
Vale señalar que ATE viene denunciando hace meses que las fábricas enfrentan un proceso de vaciamiento productivo y que esta situación formaba parte de la estrategia oficial para justificar posteriormente un recorte en la planta de personal, que se encuentra en su mayoría en situación de contratados desde hace años.
Fabricaciones Militares fue, al igual que otros sectores del Estado, duramente golpeada durante la década del ’90, cuando se cerraron gran cantidad de plantas productivas. En Córdoba, la política neoliberal impuso el cierre de la fábrica ubicada en San Francisco. Fue la lucha de los trabajadores la que impidió que Villa María y Río Tercero corrieran la misma suerte, sumado en el caso de esta última a los atentados de 1995, cuando se produjo la voladura de la planta para ocultar el contrabando de armas a Croacia.