Los Delegados concurrieron al Congreso de la Nación para transmitir su preocupación por el futuro del sector y de los trabajadores.
Trabajadores y Delegados de ATE Fabricaciones Militares, así como dirigentes de ATE Villa María y de ATE Nacional participaron el martes pasado de una reunión de la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara de Diputados. Para comenzar la sesión, la Diputada Nilda Garré, Presidente de dicha comisión, manifestó: “Recibimos una nota de los empleados de Fabricaciones Militares, en la que planteaban la necesidad de explicarnos la situación de la empresa y de las distintas secciones que tiene; y la situación de los trabajadores, de las políticas, del abandono de algunos proyectos, como el de la fabricación de vagones, que fue reemplazado por el de la fabricación de vallas. Espero que no sean para contener manifestaciones aplicando represión a la protesta social”.
José Goroso, de ATE Villa María; Orestes ‘Beto’ Galeano, de ATE Nacional; y los trabajadores del sector Juan Aragón, Fernando Peirano, Damián Albornoz y Juan Cacace se sentaron, en representación del resto de los compañeros que participaron como espectadores, frente a los diputados y diputadas presentes. Allí, los compañeros hablaron del duro presente y del incierto futuro del sector de Fabricaciones Militares.
El compañero José Goroso, de ATE Villa María, agradeció a la Comisión por recibir a los trabajadores y dijo: “Venimos a exponer la situación que venimos atravesando los trabajadores de Fabricaciones Militares desde hace un tiempo. Esencialmente desde el comienzo de la actual gestión. Aquí hay representantes y trabajadores de las Fábricas Militares de Río Tercero, de Villa María, de la Sede Central que está aquí en Capital Federal, de Fray Luis Beltrán, y de Azul”.
El dirigente luego describió: “A la fecha, ninguna de las cuatro fábricas, más la que se encuentra en la ciudad de Jáchal, superan un 20 por ciento de su capacidad de producción. El 28 de enero de 2016 hubo 140 despidos. El 31 de diciembre de este año vencen 1.684 contratos de compañeros que tienen entre 4 y 18 años de antigüedad como contratados”. Goroso además dijo que sólo hay 330 trabajadores de planta permanente, pero que incluso los puestos de trabajo de esos compañeros de planta corre riesgo, ya que “la no renovación de los contratos de esos compañeros significaría el cierre de Fabricaciones Militares, porque con 330 compañeros no se puede operar ninguna de las fábricas que tiene el complejo”.
El compañero de ATE Villa María también detalló las actividades de cada una de las fábricas y describió la desinversión y el vaciamiento que el Gobierno Nacional está realizando con esa estratégica área.
Fue el turno luego de Orestes ‘Beto’ Galeano, de ATE Nacional, quien expresó: “Parece un absurdo, pero no venimos a pedirles que nos ayuden a conseguir aumentos de salarios ni pases a planta permanente, a pesar de que la mayoría de los trabajadores de Fabricaciones Militares están precarizados. Venimos a plantear, de vuelta y como muchas veces en la historia de nuestro país, nuestra necesidad de seguir trabajando. Es absurdo que un país elimine las pocas políticas de defensa que tiene, que no se produzca para esa defensa. Pareciera que Manuel Savio estaba completamente equivocado cuando fundó las fábricas y que su visión de la defensa nacional era errónea. Hoy parece que, como decía Martínez de Hoz, da lo mismo producir acero que producir caramelos”.
“Como trabajadores del Estado organizados hoy no venimos a plantear necesidades salariales, sino que venimos a plantear la importancia de que podamos seguir trabajando por la defensa de nuestro país. Nosotros venimos de ser críticos en los planes de desarrollo de la gestión anterior, pero existían planes de desarrollo. Uno tenía matices en la discusión, e insistíamos en la necesidad de pase a planta permanente de los compañeros, pero no discutíamos despidos. Discutíamos salarios y otras cosas, pero no despidos. Hoy, igual que en los ’90, tenemos que discutir la necesidad de conservar las fuentes de trabajo, la necesidad de mantener las fábricas abiertas. Esas mismas fábricas que se mantuvieron abiertas por el esfuerzo de cientos de trabajadores que se negaron a abandonarlas y que resistieron”, agregó Galeano.