(Córdoba, 9-11-2011)
En una jornada que encontró el auditorio del Consejo Directivo Nacional desbordado de compañeras y compañeros que festejaban con alegria, asumieron en la tarde del 7 de noviembre, las autoridades del CDN y del Centro Nacional de Jubilados y Pensionados de ATE.
El flamante secretario general, Julio Fuentes expresó: “quiero agradecer y comprometerme a llevar adelante esta tarea. Con esta Comisión es prácticamente imposible errarle, hay experiencia, coraje, valentía. Con todo lo que estos compañeros y compañeras tienen, sin duda la tarea de ser Secretario General va a ser bastante sencilla”.
Bien temprano los bombos empezaron a sonar alrededor del anfiteatro Eva Perón. Poco a poco el recinto se fue colmando y cerca de las 7 más de medio millar de compañeros colmaban las instalaciones del recinto.
Banderas colgadas en el piso superior identificaban a los distintos sectores y provincias. Abajo saltando sin parar y dando rienda suelta a la alegría pecheras verdes, banderas de la agrupación y otras argentinas se unían al ritmo de la canción que nos identifica: “soy de ATE; de ATE yo soy”.
El acto arrancó con la proyección de un video en el que se describió la campaña previa a las elecciones internas del gremio celebradas el pasado 4 de agosto. Allí pasaron Julio Fuentes, Hugo Godoy, Víctor De Gennaro, Pablo Micheli y el nuevo presidente del Centro nacional de Jubilados, José Pérez, que recordó las figuras de Amancio Pafundi y Héctor Quagliaro.
Luego llegaría la mención y el diploma para las nuevas autoridades electas, refrendadas por el titular de la Junta Electoral Nacional Rodolfo Córdoba, junto con los secretarios José Luis Paparone y Verónica Mouján.
Pablo Micheli
El primero en hablar fue el secretario general saliente –y actual secretario general de CTA- Pablo Micheli, quien recordó su llegada al gremio en el año ’79 y sus caminos recorridos para llegar hasta a la conducción de nuestro sindicato y de ahí a la CTA. “Como digo en el último trabajador estatal yo me enamoré de este gremio hace mucho tiempo, y me enamoré también en este gremio, porque el amor de mi vida, la madre de mis hijos trabajaba acá, Miriam, y así nos conocimos, así que este gremio me dio casi todo lo más lindo que tengo en esta vida, inclusive me devolvió la vida después de haber pasado lo que pase. Yo voy a agradecerle toda mi vida, todo lo que me queda, y espero que sea bastante”, dijo, antes de destacar todo lo aprendido en su militancia, que atravesó las figuras de Víctor De Gennaro, Germán Abadala, Carlos Cassinelli, Leopoldo González y Héctor Quagliaro.
José Pérez y Lidia Meza
Los primeros en hablar como nueva conducción fueron el presidente del Centro Nacional de Jubilados, José Pérez, y Lidia Meza que lo secundará en su conducción. Pérez llamó a caminar todos los centros del Jubilados del país, a la creación de una Defensoría de Jubilados y a seguir luchando “por esa gran deuda interna que tiene nuestro país con sus jubilados”, que es la implementación del 82% móvil. Lo siguió Lidia Meza con su llamamiento “a no bajar los brazos” y a seguir la lucha en todos los espacios, recordando aquellos tiempos de enfermera de hospital y “a esos pesos que sólo alcanzan a sobrevivir después de toda una vida de trabajo”.
Hugo Godoy
Para el final quedaron las palabras del nuevo Secretario General del CDN, Julio Fuentes, y del Secretario General Adjunto, Hugo Godoy. Las palabras de los nuevos conductores del sindicato se abrieron con una lluvia de aplausos. Godoy subrayó que “está muy bien que lo digamos sin ningún tipo de empacho, sin ningún tipo de tapadura y que sigamos soñando y trabajando todos los días por hacer la revolución” Y recalcar que “estamos en ATE porque confiamos en la fuerza, en la voluntad y en la capacidad transformadora de la clase trabajadora”.
Y antes de ceder su lugar manifestaba que “somos parte de un proyecto en marcha que sueña, desde y para los trabajadores, por gobernar y construir nuestra Nación de manera diferente. Construir un Estado diferente”. “Y confiando en el compañero y la compañera que está al lado, en el hombro con hombro, confiando en discutir entre nosotros, en debatir y abrir cancha para más debate, para más pensamiento propio, para más construcción” y llamando al “desafío en el que nos ponemos todos los días todos, y en el que particularmente, los compañeros votaron el 4 de agosto para darle continuidad”. “Yo confío y confiamos cada uno de nosotros en este equipo. Y en todos los compañeros de las provincias y seccionales que asumen este mandato”, culminó diciendo.
Julio Fuentes
El acto fue concluyendo en medio de la algarabía de los cientos de presentes que vitorearon al flamante Secretario General, Julio Fuentes, que arrancó con sus palabra invitando a honrar con el trabajo el mandato otorgado por los trabajadores y siguió con remarcar el rol de cada CDP y de cada Centro de Jubilados. Hubo tiempo para el recuerdo de cuando su gremio provincial, el SUTEN, se sumara a ATE, y acabaran en una lucha única a través de un gremio grande y unido.
Eso dio pié para que Fuentes trazara una línea política en la necesidad de instalar a ATE en las más de 2.200 municipalidades de todo el país. “Hace unos años estábamos en 300, tal vez 400 y hoy estamos presentes en 720 municipalidades”, explicó, para luego agregar: “para crecer necesitamos, compañeros, que cada uno de nosotros seamos como eran estos compañeros en el ’86 y en el ’87. Hay que ir a hablar con los dirigentes de los gremios municipales pidiendo que se incorporen y que vengan con nosotros, pero paralelamente hay que ir a hablar a las asambleas, hay que ir a debatir a los corralones y a los palacios municipales para incorporar a ese millón y medio de compañeros que son clave para el tiempo que viene”.
Claro que también hubo lugar para su emoción personal y saber señalar que “militar en ATE me ha dado más satisfacciones que sacrificios”. O recordar que “cualquiera de nosotros, los militantes, tenemos derecho y en el fondo un deseo de que alguna vez la organización nos considere. Ello podrá pasar o no, pero el deseo lo tenemos”. O señalar que “para mí hoy es un día feliz y un día muy importante, sólo comparable a otro día para mí muy importante en mi vida, que fue el 16 de enero del año 2002, al mediodía. Horacio Fernández y yo compartíamos un calabozo en la Comisaría 2º en la ciudad de Neuquén, y al mediodía sentimos los bombos, y sentimos a nuestros compañeros que se movilizaban pidiendo nuestra libertad. Realmente fue una cosa muy fuerte y tremenda. Nosotros no los veíamos, pero los podíamos sentir. Podíamos sentir los bombos y su aliento permanente”.
El acto se iba terminando; las nuevas autoridades instaladas en sus cargos. Sólo quedaba el cierre del compañero Fuentes y sus palabras finales: “Yo, de corazón, quiero agradecerle a cada uno de los compañeros y comprometerme a llevar adelante al gremio. Con esta comisión es prácticamente imposible errarle. Acá hay experiencia, coraje, valentía. Con todo lo que estos compañeros y compañeras tienen, sin duda la tarea de ser Secretario General va a ser bastante sencilla”.