Ante la falta de respuestas del intendente Jorge Fabrissin hoy se profundizaron las medidas de protesta con una gran asamblea realizada en frente de la Municipalidad de Unquillo. Desde ATE, junto al gremio municipal local, reclamamos la reincorporación de 246 trabajadores, despedidos el 31 de diciembre, mientras se mantiene el paro por tiempo indeterminado que tiene paralizados todos los servicios.
Los brutales despidos afectan a casi el 60% del plantel de trabajadores y entremezclan la arbitrariedad con una ilegalidad manifiesta, ya que 64 de ellos son personal de planta permanente que el intendente se niega a reconocer y cinco son delegados de ATE que tienen su correspondiente tutela sindical.
La concentración contó con un numeroso aporte de vecinos de la ciudad y en la oportunidad estuvieron, junto a cuerpo de delegados de ATE, los compañeros de la Comisión Directiva Provincial. El secretario Adjunto, Luis Barcena, el Administrativo, Walter Secondino, el Gremial, Diego Guerra, y el de Prensa, Daniel Pawluchuzk, dieron un claro mensaje de toda nuestra ATE: reincorporación ya y basta de persecución sindical a los trabajadores. La protesta contó con la presencia del secretario General de la CTA Córdoba, Guido Dreizik.
Sin embargo, las provocaciones del intendente están a la orden del día. Mientras Fabrissin asegura que no cuenta con fondos para pagar sueldos, contrata empresas privadas para tercerizar servicios (bacheo, recolección de residuos, alumbrado, arreglos de calles), echando más nafta al fuego.
Estas medidas forman parte del proyecto de ordenanza de emergencia económica social y financiera que el concejo deliberante tiene previsto tratar el próximo día 20, donde Fabrissin pretende legalizar la tercerización de los servicios que se está produciendo de hecho actualmente en Unquillo.
Esto expresa el carácter político que Fabrissin le imprime al conflicto con los trabajadores y desnuda las mentiras que viene volcando a la sociedad desde los medios de comunicación.
En tanto, su plan de ajuste se mantiene firme con la supresión del servicio gratuito de laboratorio que se brindaba en el dispensario municipal y está por implementar el cobro de un bono a los vecinos por atención en dicho dispensario, que hasta el momento es de atención gratuita.
Todo esto paralelamente a que va a dejar más de 200 familias sin sustento, en situación de precaridad y obligándolas a sufrir la marginación por falta de sustento para mantenerse.
Vale señalar que la política que Fabrissin lleva adelante en Unquillo, que nos retrotrae a cuando fue interventor municipal durante la dictadura, sólo puede aplicarse por medio de la fuerza y la represión que explican la presencia policial permanente en la sede municipal.
Repudiamos la represión policial llevada a cabo hoy que dejó como saldo una compañera descompuesta por inhalación de gas pimienta y lacrimógeno que debió recibir atención médica.
Al mismo tiempo, desmentimos que se haya producido roturas en las instalaciones como se difundió a través de algunas versiones. Lamentamos asimismo también que haya resultado herido un efectivo policial, situación de la que hacemos responsable al intendente.
A la espera de respuestas del intendente se mantienen todas las medidas de fuerza que llevamos conjuntamente desde ATE con la Federación, manteniendo el paro por tiempo indeterminado.
También agradecemos el apoyo de la comunidad en este difícil trance que debemos vivir los trabajadores municipales.