Un Informe del Observatorio de Trabajo, Economía y Sociedad (OTES) señala que el presupuesto de salud en la Provincia de Córdoba es el más bajo desde 2014 y que cayó en 2024 respecto de 2023 un 8,1%. A su vez, el estudio indica que para 2024, “el presupuesto vigente para el gasto de personal es el más bajo de toda la serie, con una disminución de casi el 35% respecto a 2017”. Es decir, que la inversión en personal es un tercio inferior a la de siete años atrás pese a que la cantidad de agentes públicos pasó de 11.780 a 13160 (+12,75%).
El trabajo analiza también otras variables que permiten tener una radiografía sobre el acceso a la salud de los cordobeses. En el Gran Córdoba, el 34% de la población carece de cobertura de salud, lo que equivale a más de 570.000 personas que dependen exclusivamente de la atención pública. Mientras que el restante 66% posee cobertura de obra social, PAMI o pre-paga. Hasta fin de 2023, la cobertura creció significativamente.
Por otro lado, desde 2016, el costo de la salud ha aumentado un 10% por encima del nivel general de precios a nivel nacional y cerca del 20% en Córdoba. “Es importante destacar que la dinámica de los costos de la salud en Córdoba se ha separado de la nacional desde la pandemia, con un crecimiento relativamente mayor. Esto ha impactado significativamente en el poder adquisitivo de los salarios, con una pérdida del 42% en términos de servicios médicos”, dato correspondiente a marzo de 2024. Sobre este punto, el estudio releva el impacto de las medidas de política económica dispuestas por el gobierno nacional, que produjeron un fuerte deterioro de los ingresos y una aceleración de la dinámica inflacionaria.
El Observatorio de Trabajo, Economía y Sociedad (OTES) es un centro de estudios con sede de Córdoba, conformado por profesionales de las ciencias económicas, que “tiene por objetivo, por un lado, aportar al análisis económico, político y social de la actualidad argentina, y especialmente de la provincia de Córdoba, y por otro, brindar herramientas a distintas organizaciones (sindicatos, cooperativas, etc.) para la formación económica y social”.
EL PRESUPUESTO DE SALUD
El presupuesto que destina el Estado en un área es un indicador de la profundidad y calidad de las políticas públicas. El trabajo de OTES revela que el Presupuesto del Ministerio de Salud de la provincia durante el período 2016-2024, muestra “un crecimiento en términos reales de 2016 a 2017, alcanzando en ese año el nivel máximo de toda la serie”.
Señala que “a partir de entonces se evidencia un decrecimiento, con un recorte del 22% en 2019 respecto a 2017. Posteriormente, impulsado principalmente por la crisis sociosanitaria derivada del COVID-19, el presupuesto del Ministerio de Salud en 2020 aumentó un 21% en comparación con 2019. No obstante, a partir de ahí, el presupuesto muestra un descenso continuo, llegando a una situación sumamente compleja en el presente año. El presupuesto vigente destinado al Ministerio de Salud sufre un grave recorte del 8,1% comparado con 2023 y del 22% respecto a 2020, descendiendo al nivel más bajo de la serie, incluso ligeramente por debajo del nivel de 2014”.
Al abordar el capítulo relativo al personal del sector salud, dice el estudio que “desde 2016, el sector de salud en la provincia ha experimentado un aumento en el volumen de empleo. El total de puestos de trabajo creció un 13,3%, pasando de 35.250 en 2016 a 39.948 en 2023. Sin embargo, a pesar de que tanto el empleo público como el privado han crecido, los ritmos han sido disímiles en el tiempo”.
Indica que, en el caso del sector público, “hubo una leve disminución de cargos hasta 2019. Sin embargo, a partir del primer año de la pandemia de COVID-19, los niveles aumentaron en comparación con los años anteriores. El promedio de cargos entre 2020 y 2023 es un 10,5% superior al promedio de 2016 a 2019. En números, se inició con 11.964 cargos en 2016, disminuyó a 11.506 en 2019, creció a 12.660 en 2020 y alcanzó 13.160 en 2023. El presupuesto para 2024 incluso prevé un aumento, llegando a 13.283 cargos”.}
Por otro lado, puntualiza que el empleo privado en el sector salud mostró un crecimiento continuo durante el mismo periodo. Comenzó en 2016 con 23.286 personas trabajando en el sector y en 2023 alcanzó las 26.788. “Este crecimiento es significativo al enmarcarlo en contexto: mientras los cargos públicos crecieron un 11% en el periodo, el empleo privado lo hizo en un 15%”.
Sobre este punto, los economistas de OTES resaltan que “la evolución del empleo público y privado en salud presenta una situación donde el sector privado crece a un ritmo más alto que el público, al menos a nivel provincial. Es importante que la evolución en el empleo refleje las necesidades de acceso a la salud, particularmente de sectores de menores recursos, que dependen en gran medida de la salud pública”.
LOS SALARIOS DEL SECTOR PÚBLICO
Según el informe, después de un aumento de poco más del 6% en 2017, el gasto en personal del Ministerio de Salud ha mostrado una tendencia general a la baja. Afirma que “los únicos años en los que este presupuesto se incrementó fueron 2020, coincidiendo con el inicio de la pandemia, y 2023. Para 2024, el presupuesto vigente para el gasto de personal es el más bajo de toda la serie, con una disminución de casi el 35% respecto a 2017”.
Luego analiza que “al comparar 2024 con 2023, el gasto en personal presenta una caída del 12,3%. Este recorte afecta áreas clave del ministerio, como el presupuesto para el personal de los centros asistenciales de Córdoba Capital, que disminuye un 10,1%, y el de los centros asistenciales del Interior, con una reducción del 5,7%”.
Concluye que “esto ocurre a pesar de que se prevé un aumento en los cargos públicos provinciales según el presupuesto vigente (de 13160 en 2023 a 13283 en 2024). Esta situación sugiere que, sin una actualización significativa del presupuesto, el salario real de los trabajadores de la salud tendrá que disminuir, reflejando una contracción en el poder adquisitivo de los mismos y, en consecuencia, un empeoramiento de las condiciones de trabajo”.
DATO 1
Entre 2016 y 2023, la cobertura de salud por Obra Social o Pami aumentó del 58% al 64%; las personas sin cobertura se redujeron desde el 39% al 34% y, en el mismo lapso, las personas con Prepagas pasaron de 2,6% a 1,8%.
DATO 2
En 2016, la población sin cobertura en los tres deciles más bajos de ingresos era del 70%, mayor al 57% de 2023; mientras que en los deciles medios era del 20% en 2016 y en 2023 es del 25%. Por su parte, los cuatro deciles de mayores ingresos redujeron sus niveles de no cobertura del 8% al 6%. Es decir, entre 2016 y 2023, la cobertura aumentó fuertemente en los deciles bajos y se redujo en los deciles medios, sin modificaciones sustanciales en los deciles altos.