Ante la intención del ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, de poner un tope salarial del 60 por ciento para las conversaciones salariales del 2023, el secretario general adjunto de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, se manifestó “sorprendido porque contradice un concepto que el oficialismo había afirmado desde su asunción que era la defensa de las paritarias libres”.
“Ponerle un techo del 60% a las negociaciones salariales del 2023 viene a romper esa posibilidad de paritarias libres. Además no es verdad que haya una tendencia a la baja de la inflación. El índice de precios al consumidor de noviembre resulta ser apenas más bajo que el de diciembre, demuestra que no hay una curva en descenso”, aseguró el en comunicación con Política del Sur.
En ese sentido, entendió que “es más una expresión de deseo de gobierno que una realidad”. Agregó que “es muy difícil creer en las estimaciones oficiales durante esta gestión” y recordó que “en 2021 Guzmán dijo que la inflación iba a ser del 29% y terminó siendo de 50,9%, y en 2022 de un 33% y terminó casi triplicándose”.
“Rechazamos cualquier intento de ponerle un techo a la discusión salarial. Eso sería profundizar el ajuste que los trabajadores y jubilados venimos padeciendo en este país y se acentuó con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional”, aseveró.
Rechazamos el tope del 60% de Massa.
Es inadmisible que pretendan ponerle un techo a la discusión salarial de este año. El ministro Massa intenta poner un tope del 60% para los aumentos del 2023. Esto es contrario a las paritarias libres que siempre propagandizó el gobierno. pic.twitter.com/DytbWYJHVK— Rodolfo Aguiar (@rodoaguiar) January 16, 2023
Recalcó que “este intento es un muestra nítida de que, desde el gobierno, se están dando respuestas rápidas solamente a algunos sectores, que son los más privilegiados, pero se está desatendiendo a los justos reclamos de los trabajadores y jubilados”.
“Hoy la salida de la crisis no está siendo en favor de las mayorías sino en favor de tres o cuatro grupos empresarios que el gobierno no se animó o no quiere enfrentar”, indicó.
Acerca del visto bueno de algunos sindicatos a esta medida, Aguiar entendió que los gremios privados “tienen convenios específicos”. Sin embargo en cuanto a los trabajadores estatales remarcó: “Quienes gestionan son nuestros empleadores directos, no nos da lo mismo cualquier estado”.
“Hoy somos tres millones y medio de trabajadores estatales en Argentina: 716 mil empleos que dependen del sector público de la administración nacional, casi dos millones de trabajadores provinciales en los 24 distritos y casi 500 mil de municipales. Casi el 60% es pobre porque no pueden garantizar un ingreso mayor a 140 mil, por eso la primer demanda tiene que ver con seguir recuperando salario”, sostuvo.
Por ese lado, apuntó que el sector ha “perdido un 28% de poder adquisitivo en la gestión de Macri” y no lo han “podido recuperar con este gobierno”.
Sobre el pedido del bono de 30 mil pesos, el dirigente de ATE observó que “si bien no tiene eficiencia para garantizar recuperación salarial, actúa como refuerzo en este momento”.
“El bono que otorga el gobierno no solo es tardío sinó que discriminatorio porque sólo se les otorgó a los empleados de la actividad privada discriminando a millones de trabajadores que se desempeñan en el sector público”, concluyó.