(fuente: elresaltador.com.ar)
Profesionales en materia de género manifestaron su repudio al despido encubierto de una trabajadora que fue desvinculada mientras transitaba una carpeta médica por salud mental.
Las compañeras que denuncian el hecho sostienen que la persona afectada reviste como residente del Ministerio, y señalan que las condiciones laborales que dicha residencia posee, han sido poco claras.
“Del punto anterior se desprende la acuciante situación de les trabajadores residentes de nuestro ministerio. Recordamos que quienes figuran bajo esta condición son trabajadores que se desempeñan hace años en la institución, siendo que antes lo hacían con formas -también precarias- de monotributo o convenios con organismos externos”, expresaron las trabajadoras.
Para las trabajadoras del Polo, las residentes conviven con la permanente inquietud acerca de la continuidad laboral una vez finalizada la residencia en octubre del año próximo. Exigen que se les notifique de manera formal el modo de continuidad laboral una vez finalizado el espacio formativo.
Además, demandan el pase a contrato de residentes y becarias, así como cambien el pase a planta permanente del personal contratado.
“Solicitamos que se cese con la violencia laboral por parte de autoridades de nuestro ministerio ante las diferentes consultas y/o demandas que realizamos. Entendemos que esto configura un tipo de violencia específico, la cual como trabajadores de esta institución debemos garantizar su erradicación”.