
Como resolvió la semana pasada la Multisectorial de la Salud, para mañana está previsto que las y los trabajadores del equipo de salud provincial retomen las asambleas en los distintos hospitales provinciales. La grave situación que está atravesando el personal, especialmente a nivel salarial, exige la urgente reapertura de paritarias, atento que frente a una inflación incesante, que acumula un 25,5% en lo que va del año y proyecciones de alrededor del 50% a diciembre, el aumento del 17,5% hasta agosto acordado entre el SEP y el gobierno es completamente insuficiente.
Ante acuerdos paritarios en sectores privados que alcanzan el 45% de aumento, con clausulas de reapertura en el último trimestre del año, la inmensa mayoría de las y los trabajadores esenciales de la primera línea se encuentra bajo la línea de pobreza. El personal de la salud lleva un atraso salarial histórico que se a profundizado en la pandemia, mientras convive con un alto nivel de precariedad en la contratación.
En ese marco, diversos investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba, evaluaron el desempeño del sistema sanitario en función de la inversión presupuestaria y el discurso oficial alrededor de donde se manejó la gestión provincial de la pandemia.

Por caso, médico, magíster en administración pública y docente e investigador del Instituto de Investigación y Formación en Administración Pública (IIFAP), dependiente de la Facultad de Ciencias sociales de la UNC, Iván Ace, sostuvo en un informe difundido por el programa televisivo ‘Cordoba.ar’ que emite Canal 10, que “el Covid puso en tensión a todos los sistemas de salud del mundo. El problema es que en muchos casos estos sistemas ya venían arrastrando problemas estructurales, algo que pasaba con el sistema argentino en general y con el de Córdoba en particular”.
El investigador afirma que la Provincia “tiene un fuerte déficit de financiamiento, en relación al recurso humano, así como de la debilidad del primer nivel de atención del sistema y los problemas de coordinación con los gobiernos municipales. Tenemos un sistema descentralizado en los 427 municipios, que obliga a un gran esfuerzo de coordinación al gobierno provincial muy difícil de aplicar con el Covid”.
Ace apunta que “si la provincial hubiera tenido una red integral y fortalecida en su primer nivel de atención, con un enfoque territorial de trabajo y con equipos interdisciplinarios con conocimiento de su territorio, probablemente la respuesta al Covid hubiera sido diferente, pero nuestra respuesta estuvo centrada en los grandes hospitales, muy condicionada por la ausencia de esta primera red de atención”.
El director del IIFAP destaca que el presupuesto de salud “aumentó el 60% en 2020 y alcanzó el 10,50% del total, que es el % histórico que gastaba la provincia”. ¿Por qué con semejante aumento el año pasado apenas se recuperó el nivel histórico? Porque “desde 2015 se inició un proceso de ajuste donde el presupuesto en salud pasó del 10 y pico en 2015 al 8.60% en 2019”. Esto es un ajuste del… ¡20%!
“De esta forma, los recursos extraordinarios que se invirtieron para afrontar la pandemia no fueron más que la recuperación de los recursos perdidos que el sistema de salud había ajustado cuatro años antes. Lo que podemos ver en el análisis de los datos presupuestario y del recurso humano. Además de agarrarnos la pandemia con un sistema de salud con problemas históricos, nos tomó en el medio de un ajuste en porcentaje al volumen general del recurso provincial”.
Discurso oficial
En este contexto, las y los trabajadores afrontaron la pandemia con escasos recursos en términos reales y un discurso oficial que ninguneó su papel en la crisis sanitaria, al hacer foco en “una narrativa basada en la racionalidad sanitaria” que ofreció “una imagen de control estricto sobre el sistema de salud”. Así lo entiende la psicóloga, docente de la UNC e investigadora, Jaschele Burijovich, en una artículo publicado recientemente en el portal informativo ‘La Tinta’. “El principal eje sobre el que se articula es el reforzamiento de la infraestructura (camas de terapia, respiradores) y se sostiene en la capacidad y robustez del sistema público provincial”.

Mientras, afirma Burijovich, se introdujo “a los/as expertos/as científicos como una manera de legitimar las políticas públicas en términos de una lógica tecnocrática(… ), y se reafirma el ‘modelo cordobés’ de afrontar la crisis. Un tono discursivo sostenido en el ‘todo bajo control’ que contrasta fuertemente con los relatos de los/as trabajadores/as”.
De esta forma, para la docente universitaria, se tomaron decisiones “sin comunicar ni lograr consensos con los/as trabajadores/as”. lo que en algunos casos derivó en “el caos y la improvisación. Hay protocolos para médicos, administrativos, empleados de limpieza, etc., pero los mismos no eran adecuados porque desconocían en parte el funcionamiento de algunos hospitales como también la distribución de los espacios físicos. al tiempo que hubo “apertura de lugares de atención, aumento de camas, sin contar con el equipo de salud necesario”.