La marea feminista inundó las calles de Córdoba en defensa de los derechos conquistados, frente a la amenaza de los discursos y prácticas de odio, y la profundización de la feminización de la pobreza ante las políticas de ajuste imperantes.
Este 8 de marzo se llevó a cabo el primer paro transfeminista contra el gobierno de Javier Milei donde más de 60.000 mujeres y disidencias militantes, activistas, de organizaciones sociales, derechos humanos, partidos políticos, sindicatos y autoconvocadas se dieron cita este viernes en en el centro de Córdoba en un nuevo Paro Internacional de Mujeres Trabajadoras.
Nuestras compañeras trabajadoras concentraron en la esquina de Colón y Fragueiro y se dirigieron hacia las inmediaciones del Patio Olmos.
Durante el transcurso de la marcha las estatales visibilizaron nuestras principales demandas reclamando salarios dignos, el cese de despidxs de trabajadorxs en el estado, contra el ajuste y el hambre y la baja del Decreto de Necesidad de Urgencia del gobierno nacional de Javier Milei que está provocando un aumento atroz de la pobreza, donde el sector más afectado son las familias monomarentales que tienen como único ingreso el trabajo de las jefas de hogar y que hoy no pueden sostener las cuatro comidas diarias para sus hijxs.
En el sector estatal la situación es grave con trabajadoras y trabajadorxs que se encuentran con salarios por debajo de la línea de pobreza, con amenazas de despidos y cierres de programas que atentan contra la garantía de derechos.
El recorte de políticas públicas con perspectiva de género destinadas a sostener a los sectores más vulnerables de la sociedad y la destrucción del Estado que está llevando adelante el gobierno de Javier Milei, representa un retroceso enorme en todo lo alcanzado hasta el momento. Es por eso que el movimiento transfeminista, en articulación con los sindicatos, partidos políticos y organizaciones sociales, salieron a las calles para defender los derechos conquistados y asegurar que no darán ¡Ni un paso atrás!