En un clima de mucha emoción y cariño, la referente principal de Abuelas de Plaza de Mayo-Córdoba, recibió esta mañana un sentido homenaje donde se realizó un reconocimiento a su lucha y su trayectoria como figura indiscutible de los DDHH en la provincia. El secretario General de ATE Córdoba, Federico Giuliani, encabezó el acto que contó con la presencia de dirigentes y activistas de nuestro gremio, así como de la CTA Autónoma.
Sonia, de 92 años y admirable estado de ánimo, agradeció el reconocimiento y sonrió bajo el barbijo cuando recibió, entre varios presentes, una remera estampada donde confluyen las imágenes de ATE y de Abuelas de Plaza de Mayo. “Hoy me la pongo en la marcha”, dijo y despertó el aplauso general.
Junto a Giuliani y Sonia, en la mesa que presidió el acto en el Salón Héctor ‘la perra’ Castro, de la sede del Consejo Directivo Provincial (CDP), estuvieron la secretaria de Prensa Julia Giuliani, la directora del Departamento de Géneros y Diversidades, Gabriela Alcoba, y la abogada de Abuelas, Patricia Chalub, hermano Jorge Chalub, que integra el equipo de la Secretaría de DDHH del CDP y fue uno de los motores del homenaje.
En la presentación de la acto, Julia Giuliani, explicó que “en el Día de la Mujer Trabajadora, y en el marco del 8M y del mes de la memoria, tenemos la satisfacción de homenajear a Sonia Torres y en su figura a nuestras abuelas de Plaza de Mayo, faro y guía para allanarnos el camino a quienes transitamos este andar de la militancia en la búsqueda de la unidad y de construir un país más justo”.
La secretaria de Prensa del CDP dijo también que “hay un paralelismo entre las abuelas y el movimiento feminista en el sindicalismo. Hicimos nuestra la consigna ‘agradezcan que pedimos justicia y no venganza’ que nos enseñaron las Madres y las Abuelas y que señalan constantemente, para construir desde el amor y no desde el odio, para bregar por Memoria, Verdad y Justicia”.
Posteriormente, Federico Giuliani dio la bienvenida “a Sonia a nuestra casa. Tenemos el orgullo que estés acá porque creemos que un sindicato debe desplegar una política integral, que no se limite al convenio colectivo y el reclamo salarial, sino que difunda la política de DDHH en nuestro ámbito de actuación territorial. En ese sentido, creamos el Departamento de DDHH apenas asumimos, a cargo de César Theaux, porque de esa manera pasamos de las actividades reivindicativas para tener políticas concretas desde el sindicato”.
El dirigente recordó que “hay más de 100 trabajadores y trabajadoras estatales de la provincia de Córdoba –nacionales, provinciales y municipales- que fueron detenidos desaparecidos durante la última dictadura genocida militar. Por eso, en este día tan importante que determina el rol de la mujer trabajadora y la mujer luchadora, Sonia Torres sintetiza hoy en su figura estos roles que queremos destacar”.
También afirmó en otro tramo que “Sonia nos enseña que la única pelea que se pierde es la que se abandona. Como hijo de un preso político quiero transmitir el orgullo que nos genera en el sindicato poder hacer este reconocimiento y destacar la valentía de las madres en plena dictadura de haber denunciado lo que sucedía”.
Luego, Giuliani apuntó que “esto es importante articularlo con la pelea del movimiento obrero en aquellos años. Recordemos los paros y movilizaciones por ‘Paz, pan y trabajo’ y que generaron puntos de inflexión en un momento, junto con los organismos de DDHH, que junto a Malvinas, fueron hechos fundamentales para que la dictadura no siguiera más tiempo, como sucedió en países hermanos como Chile, Paraguay, Brasil o Uruguay”.
Por último, en otro párrafo, destacó “la recuperación de La perla para transformarlo en un sitio de memoria, al igual que sucedió con el Campo de la Ribera, o haber juzgado a un asesino cobarde como Luciano Benjamín Menéndez, con Sonia como síntesis de muchos compañeros y compañeras que dejaron su vida para que hoy podamos hablar de justicia”. Y adelantó que el 17 de este mes la comisión directiva de ATE Córdoba hará una visita guiada a La Perla como forma de capacitar a las y los compañeros que aun no conocen en profundidad qué sucedió durante el genocidio de la dictadura cívico-militar a escasos kilómetros de la ciudad de Córdoba. “El dirigente gremial tiene que saber organizar una asamblea, tiene que saber transmitir lo que pasa en una nota de prensa pero también debe for4marse en historia para tener una mirada integral. Esta visita al ex campo clandestino tiene por objetivo esa formación”, concluyó.
No hay odio
Seguidamente, tomó la palabra la homenajeada para recordar que ATE la recibió cuando, junto a otras madres, buscaba apoyo para encontrar a su hija Silvina, secuestrada junto a su compañero cuando estaba embarazada y fusilada en La Perla, no sin antes parir a su hijo en la Maternidad Provincial, niño que hoy es un adulto que sufre el robo de su identidad.
“Supe del niño por una presa común que estaba allí en el hospital durante el parto. Después de parir Silvina fue devuelta a La Perla donde la fusilaron. Al niño lo llevaron a la Casa Cuna y no sabemos que más pasó. Hace más de 40 años que lo buscamos”, rememoró Sonia Torres, ante la atención general.
La referente de DDHH valoró el trabajo realizado por Abuelas de Plaza de Mayo para que 130 hijas e hijos de desaparecidos robados recuperen su identidad, pero recordó que fueron 500 los y las niñas robados por lo que falta ubicar e identificar a cientos aun, entre tantos a su propio nieto. Por eso, repitió el pedido histórico que hace en cada acto público: “si saben de alguien que dude de su identidad mándenlo a Abuelas que lo vamos a recibir con mucho amor y lo vamos a contener para ayudar a saber quién es realmente”.
Sonia contó como fueron los primeros pasos del organismos de DDHH durante la dictadura, sus viajes al exterior para pedir solidaridad y cómo se actuaba “en una época donde no existía la lectura del ADN humano y era más difícil determinar la identidad de una persona”.
En el recorrido por su trayectoria personal y de Abuelas en la búsqueda de las y los hijos robados, al tiempo que exigían memoria, verdad y justicia, relató que “la principio la gente no nos quería pero con el tiempo aprendieron que nos moviliza el amor y no el odio, Yo tengo amor. Cuando veo lo que hemos vivido todos estos años sé que solo hice lo que tenía que hacer”. Para luego recibir los regalos y agradecer el cariño de todos los presentes. La foto final selló el acto que quedará en la memoria de todos en ATE Córdoba.